Los Descalcificadores Magnéticos ayudan a resolver los problemas causados por la calcificación que
se incrusta en las tuberías o
en aparatos por los que circula el agua.
Forzamos el paso del agua a través de
un fuerte campo magnético*, gracias al cual se crea
una
disociación molecular de las "sales duras" (iones de calcio y magnesio) que se transforman en un suave
precipitado de partículas parecidas al talco llamadas Aragonita.
La Aragonita permanece en suspensión y evita para siempre la formación de
depósitos calcáreos.
* El efecto magnético se produce con imanes permanentes, resistentes a las altas temperaturas
y las aguas agresivas. No se produce a través de conexiones eléctricas.